Sigamos con los sentimientos.
Solo se ama lo que se conoce bien.
Solo se ama lo que se conoce bien.
No basta con el "seny" nacional genéticamente heredado "dels progenitors A i B", ni con la mera voluntad de ser una "naciò", que se pone de relieve en los lemas "som i serem, si volem" y "som six millions".
No, todo lo citado no es suficiente. El sentimiento puro solo se puede elevar a las alturas más excelsas del alma catalana si se pisa la tierra cuatribarrada, si se respira su aire privativo, si se realiza, cual nuevo Guifré el Pilôs, una cruzada por sus tierras, de Norte a Sur, de Llevant a Ponent, sintiendo la tierra, tocándola, en plena intimidad con ella, dejándose arrullar.
En una palabra, y permítanme ustedes la expresión, para amar de verdad a Cataluña, hay que mamarla.
"Para llegar a la presidencia de Cataluña, he cruzado Cataluña muchas veces. La he cruzado de levante a poniente, del norte al sur, la he pisado, la he conocido a fondo, la he respirado, la he tocado, y, si se me permite una expresión muy coloquial, podría decirse que la he mamado"
Artur Mas. Acto de toma de posesión como Presidente de la Generalitat, 2010
Artur Mas: Confieso que he mamado
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